Los concejales con dedicación exclusiva del nuevo gobierno del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria -formado por el PSPV, Compromís y Esquerra Unida- han renunciado a cobrar ningún tipo de dieta o indemnización por oficiar bodas civiles o por los tribunales de oposiciones que están fijadas en un total de 80 euros por cada uno de ellos. La medida se aplicará a lo largo de esta legislatura a los ediles del gobierno que perciben un salario del consistorio en contraste con los más de 18.000 euros que los concejales del PP sí recibieron en el periodo 2011-2015 en cifras globales.
Ahorro económico
El objetivo de esta medida es propiciar un ahorro económico a las arcas municipales al tiempo que establecen “una nueva forma de entender la política ya que se concluye con una tradición en el Ayuntamiento de Riba-roja que hasta la fecha eran una práctica habitual en los gobiernos de los últimos 20 años del Partido Popular hasta el punto que en algunos casos se trataba de un sobresueldo encubierto en toda regla”.
El nuevo gobierno de Riba-roja recuerda que en la anterior legislatura los concejales y concejalas del Partido Popular “no renunciaron a percibir las dietas establecidas en 80 euros en concepto de celebración de bodas civiles o por la asistencia a algunos órganos colegiados como mesas de contratación o participación en tribunales de oposición, concurso u otros organismos encargados de selección de personal”.
El alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, del PSPV, ha calificado esta iniciativa de “ética y ejemplar” que desde el actual gobierno local “ponemos en práctica como una demanda ineludible que ya solicitamos repetidamente cuando estábamos en la oposición ya que pensamos que la asistencia a este tipo de actos o celebraciones es una de las funciones que tenemos encomendadas por la asunción de las responsabilidades del cargo público; por tanto, este equipo de gobierno es absolutamente consecuente con sus palabras y por ello entramos en una nueva forma de entender la política y el ejercicio de la gestión pública”.
