La Policía Local y la Sociedad de Cazadores de Llíria han capturado a 15 canes peligrosos que atacaban a personas, animales y cosechas. Los perros han sido entregados a la empresa Ribamontes, contratada por el Ayuntamiento de la localidad edetana, para su cuidado y manutención, según ha informado el Ayuntamiento en un comunicado.
La Sociedad de Cazadores de Llíria ha apresado a ocho cachorros y un perro adulto salvajes. La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, alertada por el departamento de Animales del Ayuntamiento de Llíria, autorizó a la Sociedad de Cazadores el control de estos animales. Por otro lado, la Policía Local ha capturado a seis de estos perros que habían atacado a una vecina en su chalet, situado en la partida de Franchina.
El consistorio ha explicado que hace varios meses que la Policía Local de Llíria trataba de apresar a una jauría de perros peligrosos tras varias denuncias de vecinos que habían sido atacados por un grupo de entre 10 y 12 canes en las inmediaciones de las partidas de Pla del Morro, Casa Carlos y Caicons. Los vecinos pudieron afortunadamente refugiarse en sus coches y huir.
Además, esta manada de perros violentos ha matado a varios jabalíes y a ocho ovejas de un ganadero. Igualmente, han destrozado la cosecha de varios agricultores.
¿Se han matado perros?
Las redes sociales se han hecho eco, durante los últimos días, de la autorización de la Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente que permitía a una asociación de cazadores de Llíria a disparar a perros dentro de la partida de la Concordia, para evitar daños a la caza e incluso se ha puesto en marcha una iniciativa popular en la plataforma Change.org para recoger firmas en contra de esta media, concretamente la petición solicita firmas de los ciudadanos para que “se retiren ipso facto la autorización de disparar a los perros sueltos en un coto de Lliria”.
Ante estas informaciones el alcalde de Llíria, Manuel Izquierdo, ha destacado las actuaciones tanto de la Policía Local como de la Sociedad de Cazadores para “garantizar la seguridad tanto de nuestros vecinos como de los canes” y ha explicado que “en ningún caso se ha matado o disparado a ninguno de estos animales. La perrera Ribamontes, contratada por el Ayuntamiento, les está dando alimentación y tratamiento veterinario”.







